Alvato destaca que una exposición prolongada y excesiva a los rayos solares daña la pintura, reduciendo su grado de coloración al menos un 5% cada año.
Con la llegada del verano, las altas temperaturas, el polvo y la arena son los grandes enemigos de la carrocería de los coches. Según los especialistas de Alvato, la importancia del lavado y la prevención es capital si se quiere mantener en buen estado la pintura del vehículo. Una exposición prolongada y excesiva a los rayos solares daña la pintura, reduciendo su grado de coloración al menos un 5% cada año.
Desde Alvato indican que el problema de esta época estival también está en la arena y el polvo que con el contacto y el roce, si éstos están presentes en la carrocería, pueden rayar la superficie y dañarla con pequeñas marcas. Es aquí donde la limpieza entra en escena, pero no sólo con el lavado sino también con productos más avanzados orientados a la prevención frente a estos agentes externos.
La nanotecnología no sólo ha servido para que sea utilizada frente al Covid-19 como método para eliminar y prevenir virus y bacterias en cualquier superficie. Existen también productos orientados a preservar y cuidar la carrocería del vehículo, evitando así los daños por rayos solares y partículas de arena y polvo. Después del lavado del coche, tienen una aplicación sencilla pero muy cuidadosa, ya que se realiza a mano como si se estuviera aplicando una capa de cera.
Con apenas unas gotas se consigue la protección de la chapa, que a partir de ese momento repelerá el polvo y la arena evitando su fijación en el vehículo. Algo similar a lo que ocurre con el agua, puesto que hay productos nanotecnológicos hidrófugos para los cristales y lunas del coche. También contiene un filtro solar, que evita y previene del daño por rayos solares de forma muy eficaz en los meses de más calor.
