Los modelos de limpieza, desinfección e higiene van a cambiar durante los próximos años. Y se está notando ya de manera inminente debido a los efectos del coronavirus y el temor a su contagio.
Uno de los espacios que más preocupan es el del interior del vehículo. Cerrado, sin ventilación durante mucho tiempo y en el que no se suelen realizar limpiezas a fondo de forma habitual, es un lugar óptimo para que proliferen microorganimos como bacterias, virus y otros como los ácaros.
Los especialistas en limpieza, desinfección e higienización de vehículos de Alvato indican además que existen zonas donde se produce una mayor concentración de microorganismos que pueden resultar especialmente nocivos para la salud de las personas. Una de ellas son los conductos de ventilación.
El hecho de cambiar los filtros cuando lo indican los libros de revisiones no significa que el problema se solucione. Es cierto que con ello se reducen las partículas en suspensión de polvo o polen, pero tras los primeros cientos de kilómetros ya vuelven a ensuciarse con el agravante de que la suciedad en los conductos sigue estando presente.
Es recomendable que al menos tres o cuatro veces al año se realice una desinfección e higienización de los conductos de ventilación. Si antes este proceso se recomendaba hacerlo una o dos veces al año, normalmente en primavera y verano como meses más secos, con aparición en escena del coronavirus las medidas de limpieza han de ser más escrupulosas.
Conviene recordar que en el momento en el que activamos el aire acondicionado o la calefacción estamos dispersando no sólo las partículas de polvo y polen sino que la suciedad de los conductos sale al exterior del vehículo, depositándose en el ambiente del habitáculo.
Los responsables de Alvato inciden además que con la desinfección e higiene de esta zona del coche no sólo vamos a combatir el problema de los microorganismos nocivos para la salud, sino que además eliminaremos el mal olor que percibimos como consecuencia de la suciedad.
La reducción de alergias por eliminación de polvo y polen acumulados, la función bactericida de las espumas que se utilizan en el proceso junto con el ozono, y la eliminación del picor de ojos que puede provocar la sedimentación de la humedad procedente del agua condensada son otras de las ventajas que tiene este proceso de limpieza de los conductos de ventilación del vehículo.
Cómo desinfectar el coche
Por otra parte los expertos de Midas han recopilado las ventajas de desinfectar nuestro coche con la tecnología de oxígeno ionizado y mantener, así, el interior del vehículo libre de bacterias y virus de forma rápida, inocua y asequible.
La primera recomendación por parte de la compañía es evitar los productos de limpieza altamente químicos como la lejía y el amoniaco, ya que podría perjudicar el interior del vehículo además de ser tóxico para el ser humano. En contraposición, apuntan que lo más eficiente e inocuo es realizar esta desinfección con tecnologías como la de oxígeno ionizado de su sistema AirCare. Un simple proceso con el que se introduce una máquina en el interior del vehículo para hacer recircular el aire por la máquina, hasta 5 veces, donde es sometido a un campo eléctrico que genera lo que llaman “aire energizado” que elimina hongos, bacterias y virus, como el coronavirus, sin utilizar ningún químico y, en consecuencia, sin dañar ningún componente del vehículo.
También advierten que limpiar el coche no solo significa volante, cambio de marchas y ventanillas, sino que en estos momentos el aire que se respira y los conductos de ventilación también pueden esconder bacterias. Por esa razón, desde la compañía destacan la importancia de la desinfección profesional con sistemas como oxígeno ionizado para conseguir una limpieza profunda de todos los elementos y un vehículo completamente libre de virus.
Si se viaja con personas de grupos vulnerables, como mayores o niños, es fundamental realizar una desinfección del vehículo completa, y de la mano de profesionales, con las máximas garantías de seguridad.